Es una de las muchas imágenes de la Universidad de Princeton que el astrofísico Adam Burrows ha recordado, usando super ordenadores para simular una explosión en profundidad dentro de una estrella llamada supernova. Esto no es una explosión corriente termonuclear en una estrella sana abastecida de su combustible. En cambio, es el tipo de explosión que ocurre cuando finaliza la vida de una estrella.
"El resto de la estrella, su superficie, y la mayoría de su masa son completamente ajenos a su destino inminente, pero la explosión, que llevará sólo unos segundos, se propaga a través de la estrella en períodos de horas a un día", explica Burrows.
Con la ayuda de la Fundación Nacional de Ciencia (NSF), Burrows utiliza super ordenadores para crear espectaculares imágenes en 3-D de supernovas que le permitan ver dentro de estas super estrellas justo antes de que exploten.
"Una de las cosas que hemos descubierto es que no explotan como un anillo de expansión hacia fuera. Explotan en trocitos como dedos, muy turbulentso", continúa Burrows. "El material que es expulsado en las supernovas entonces se comenzará a colapsar . Parte de ese gas se forma para la próxima generación de estrellas y se pasará por el mismo ciclo una y otra vez. "
Las supernovas son también la fuente de muchos de los elementos pesados de la naturaleza. De hecho, sin ellos, no existiríamos!"
"Algunos de los elementos pesados fabricados en supernovas son el calcio que está en nuestros huesos, el flúor en la pasta de dientes, y el hierro en la sangre," dice Burrows.
Se necesita una gran cantidad de la energía de las estrellas, para que todos esos elementos. "Cuando las supernovas explotan, liberan el equivalente de 10 a 28 [o diez octillones] megatoneladas de TNT en energía. Un megatón solo es el equivalente a una gran bomba de hidrógeno," señala Burrows.
Las simulaciones por ordenador de las supernovas se crean utilizando complejos modelos matemáticos y se necesitan meses para procesarlas. "Ser capaz de comprender las explosiones de estas simulaciones es un hito en la astrofísica teórica", señala Burrows.
Sólo las estrellas que tienen cerca de ocho veces la masa de nuestro Sol van a morir de este tipo de muerte violenta. Burrows, dice que nuestro Sol es una estrella bastante aburrida en comparación con las que hay ahí fuera.